sábado, 24 de septiembre de 2011

La brújula

Hoy ve la luz el primer número de Crearte Magazine, revista que para nosotros es la materialización de un sueño, la prueba de que la mezcla de ilusión, paciencia y trabajo siempre da buen resultado.

Crearte Magazine nace con el propósito de llegar a esas personas que busquen encontrar la mejor versión de sí mismas, que deseen conocerse y vivir al 100% de sus posibilidades, exprimiendo cada gota del día a día.

Con nuestros artículos ponemos a tu servicio conocimientos y herramientas útiles para ayudarte en tu autodescubrimiento y mejora, además de ofrecerte nuestros contactos y ayuda personalizada para contrataciones de procesos individuales de coaching.

Crearte Magazine es un viaje guiado por esta sección, LA BRÚJULA, que a modo de editorial te orientará sobre el rumbo de la revista y sus diferentes apartados: NUEVAS TENDENCIAS, donde se recogen pinceladas de las disciplinas en auge que pueden complementar un proceso de coaching; CUERPO Y MENTE, ejercicios, consejos, prácticas y hábitos saludables para mejorar nuestra rutina; REPORTAJE, una parada en el trayecto para descubrir un tema en profundidad; AUTOCONOCIMIENTO, apartado que ofrece un surtido de herramientas para tu trabajo personal; COACH?, una mirada a la sociedad y a nuestro entorno más inmediato, y ENTREVISTA, palabras en primera persona de nuestro compañero de viaje escogido para la ocasión.

Tu papel, querido lector, es de vital importancia, por esta razón abrimos el correo crearnos@ creartemagazine.com donde, con el objetivo de ser una publicación cercana e interactiva, esperamos recibir tus inquietudes y sugerencias de mejora.

Descúbrete, escúchate, compréndete, créate y anímate a empezar a andar este maravilloso camino que es el autoconocimiento, en Crearte Magazine te acompañaremos. Un cálido abrazo y que disfrutes del primer número.

Laura Maroto, directora de Crearte Magazine

jueves, 22 de septiembre de 2011

Autorretrato: Vicente Marrama

“El coaching es un entrenamiento vital para encontrar la mejor versión de uno mismo”

Vicente Marrama, 51 años, tras pasar por el mundo de la educación y el periodismo, en 2002 llega al coaching.
Formado en Coachville, coaching norteamericano, y Ola-Coach, coaching europeo, dirige desde 2008 la empresa Potentia-Coaching Corporativo www.potentiacoaching.es




Vicente, es el primer número de Crearte Magazine así que te pediré que nos expliques un poquito:

¿Qué es el coaching?
Es un entrenamiento vital que te apoya para clarificar tus objetivos en la vida y te impulsa a llevarlos a cabo.
El coach está contigo en ese proceso de cambio, en ese viaje desde tu situación presente a tu situación deseada.
Un viaje que mejorará tu autoconocimiento y tu autoestima.

¿Qué no es el coaching?
El coaching no es terapia, ni consultoría. Es un entrenamiento.

¿Qué diferencia el coaching de la psicología y de la consultoría?
Tanto un psicólogo como un consultor dicen a sus clientes lo que tienen que hacer y cómo. Les instruyen. Un coach pregunta, hace descubrir y consigue que sus clientes sean conscientes de la situación y tomen sus propias decisiones.

¿Para quién es?
Para todas las personas que quieran optimizar y mejorar sus vidas. El coaching nos capacita y entrena para encontrar la mejor versión de uno mismo.

¿Cuál es el perfil de un profesional de coaching?
Un coach encuentra sentido vital cuando apoya a sus clientes para que consigan sus objetivos y se realicen. Tiene que conectar con el universo personal de cada cliente, con su motor. Para conseguirlo necesita escuchar activamente, generar opciones y claridad en el cliente y establecer con él una alianza sólida y de plena confianza.

¿Cómo se desarrolla un proceso de coaching?
A través del objetivo del cliente, el coach entiende y ve la diferencia entre su situación actual y su situación deseada y la percepción que el cliente tienes de ambas.
El coach ayuda a generar opciones al cliente, a identificar barreras y eliminarlas y le apoya para que pase a la acción. Si haces lo mismo en tu vida seguirás obteniendo los mismos resultados. Si quieres resultados nuevos, tienes que pasar a la acción y emprender acciones nuevas y diferentes.
¿Se puede alternar el coaching con otros tipos de terapia?
Sí, puede ser un complemento efectivo para algunas terapias.
¿Cuántos tipos de coaching existen?
El coaching tiene básicamente dos ámbitos de aplicación: personal, aquí hablamos de life coaching y empresarial, donde tenemos coaching ejecutivo, de equipos y organizacional.

¿Por qué recomendarías a alguien hacer un proceso de coaching?
Recomendaría hacer un proceso de coaching porque tiene múltiples beneficios. Es una tecnología que se puede aplicar a cualquier objetivo y deseo de cambio, desde el ámbito laboral hasta el más personal y espiritual.


Para acabar, te pediré que cierres la entrevista con una frase que, como coach, te guste especialmente:
Hay una frase que siempre me ha inspirado y me ha gustado especialmente, además de que me parece un perfecto cierre:
“Un buen coach consigue que su cliente encuentre y active la mejor versión de sí mismo”. Todos deberíamos vivir la mejor versión de nosotros mismos.

Encuentra tu Norte Familiar

Antes de entrar en materia, queridos lectores, quería agradecer desde estas páginas a mi querida Laura, creadora y directora de todo este sueño que es Crearte Magazine, la oportunidad y confianza depositada en mí.




Dicho esto vamos al tema:

¿Qué es el coaching familiar?
El coaching es una metodología de trabajo para despertar la conciencia y responsabilidad, entendida la responsabilidad como la capacidad de dar respuesta por uno mismo.
Ayuda a las familias a la mejora de la convivencia en casa, al desarrollo de talento y a proporcionar herramientas de comunicación eficaces. Potenciar la formación de los padres y de los hijos con bases sólidas que ayuden a impulsar al máximo sus habilidades y talentos con especial atención al desarrollo de la inteligencia emocional.
¿Cuál es el valor que aporta a las familias?
Es una nueva forma de aprendizaje y de avanzar en el desarrollo individual y colectivo, considerando a una familia como grupo. Extraeremos el talento y la creación de vínculos nutritivos que nos llenen y nos permitan sacar lo mejor de nosotros mismos en las tres facetas: la familiar, la profesional y la personal.
Consideramos que el equilibrio que lleva a la felicidad es un resultado colateral de una vida con sentido. Descubrir ese sentido es una meta en sí misma para todo ser humano y desde Lashijasdelalegria creamos entornos y espacios donde ese descubrimiento, que hará que tu vida cambie, pueda darse.

¿Qué aplicaciones prácticas hay en el coaching familiar?
El coaching es una estructura que permite realizar cambios positivos. En los puntos de inflexión de la vida de las personas, allí donde una decisión o un comportamiento va a tener una influencia mayor, es donde el coaching es especialmente interesante.
Son puntos de inflexión de la vida: la llegada de los hijos, la crianza y la educación, la elección de pareja, las rupturas sentimentales, las mejoras profesionales, el papel de nuestros mayores… Son todas situaciones de cambio, a mejor o a peor, que podemos gestionar profesionalmente para lograr mejores resultados, mayor calidad de vida.

¿Cuándo usar coaching familiar y cuándo acudir a un terapeuta?
El coaching no es terapia. Son estructuras de apoyo al cambio con finalidades distintas. Aquí el coach ve lo mejor de ti mismo, te apoya y potencia tus fortalezas para trasladar ese patrón de eficacia a tus posibles puntos de quiebre. Para que te pongas en marcha con un mapa realista, alentador y potenciador al mismo tiempo. Por poner un símil: un terapeuta es como un barquero que te lleva a buen puerto cuando tú no puedes remar o no ves por dónde empezar a hacerlo. Tu coach, en este caso, sería tu copiloto, es experto en mapas, pero eres tú el que conduces desde el minuto uno de la salida hasta la llegada a la meta. Tú eres cliente -no paciente- y encuentras las respuestas que funcionan y te motivan, las que despiertan tus recursos y habilidades interiores.

Los objetivos de coaching son por ejemplo: extracción de los talentos personales que todos tenemos; mejora de las relaciones, personales, familiares o laborales; gestión de conflictos de intereses; motivación para padres, hijos, abuelos, docentes, etc.
En definitiva, sacar lo mejor de nosotros mismos, desplegar y dejar volar nuestros recursos interiores que es nuestro mejor tesoro.
En Lashijasdelalegria estamos adheridos al código deontológico y, si detectamos que existe cualquier patología en la que el cliente necesita una intervención terapéutica, se informa al cliente de que el proceso de coaching no es apropiado en dicho caso.
Promovemos la educación integral que abarque todas las potencialidades y facetas de la personalidad de niños, niñas y jóvenes orientada hacia un aprendizaje duradero y de calidad. Cooperamos con las escuelas de padres, los centros educativos, las asociaciones y organizaciones nacionales cuyos fines sean favorecer la calidad de las relaciones familiares. Y cooperamos con los miembros de las familias tanto de forma individualizada como de grupo para la mejora de la convivencia y para aportar en procesos de cambio en la familia y ante situaciones o nuevas estructuras familiares.

El coaching familiar no es una escuela de padres ni ofrece soluciones de un determinado estilo o ideología. El coaching de familia permite a cada persona encontrar por sí misma sus respuestas y estrategias. El respeto a los valores y la propia orientación es la base del coaching.
Hoy iniciamos un camino juntos en el que, número a número, iremos redescubriendo a nuestra familia y a nosotros mismos como miembros de ella.

¿Cómo?
Tomando conciencia de quién somos y qué queremos, aquí y ahora.
¿Cómo podremos llevarlos a la práctica? Con un plan de acción. El coaching es acción.
Te proporcionaremos todas las herramientas necesarias para llevar a cabo las acciones de cambio.
Cada familia es única y maravillosa, lo único que hay que hacer es descubrirlo; lo haremos reconociendo a cada miembro y dándole el lugar que le corresponde. Hoy en día andamos un tanto perdidos a lo que la familia se refiere, las estructuras han cambiado, los roles se han difuminado, el número de miembros, familias monoparentales, custodias compartidas, etc.

No sé si recordareis que hace algún tiempo había un anuncio en televisión de un coche que hablaba de una familia nueva, una familia diferente, un papá que recogía a sus hijos de su primera mujer del colegio, después pasaba a buscar a los de su mujer actual que no eran suyos y por ultimo recogía a una niña que era la hija que ambos tenían en común. En el coaching familiar entran TODAS las familias en la totalidad de su sentido más amplio, sea cual sea su forma.

Todas estas inquietudes empezaron a despertar en mí en los años que trabajé exclusivamente con niños en edades comprendidas entre los cuatro años y los ocho o nueve años, entrando ya en la preadolescencia. No podía dejar, como espectadora, de observar las actitudes y comportamientos de los niños, cómo actuaban cuando estaban solos, cómo cuando los padres estaban presentes, cómo se relacionaban con su sexo contrario, sus descubrimientos, sus mentiras, sus emociones, sus instintos y, como no, su espontaneidad y alegría.

Mi objetivo personal en esta sección es brindar una mirada diferente a nuestros seres queridos con un lenguaje sencillo y aclarador que llegue de cerca al lector. Espero que me vayáis dando vuestro feedback queridos lectores.
Va llegando la hora de la despedida, no sin antes emplazaros al siguiente número de Crearte Magazine donde daremos respuestas a alguna de las siguientes cuestiones:
¿Quién nos enseña a ser padres?
¿El buen padre o madre se nace o se hace?
¿Por qué ahora como padres no me funciona con mis hijos lo que a mi me enseñaron mis padres?
¿Qué era eso que nos dijeron de la conciliación laboral y familiar?

Estas y otras muchas otras preguntas que irán surgiendo (para ello tenéis a vuestra disposición el buzón de crearnos@creartemagazine.com) las iremos aclarando para así encontrar CADA UNO DE NOSOTROS nuestro NORTE FAMILIAR. Quedáis invitados.
Un abrazo a todos.

Ester Fernández
esterfernandez@creartemagazine.com

Coaching como modelo de intervención social

A lo largo de todos los artículos que has leído en el primer número de Crearte Magazine, seguramente te hagas una pequeña idea de lo que significa y de lo que comporta el concepto de coaching en nuestras vidas, pero para darle una nueva perspectiva a la palabra nos permitiremos el lujo de esbozar algunos conceptos clave para finalmente construir una definición didáctica y conciliarla con la de coaching social.




Concepto de coaching aplicado a lo social

Cuestionamiento, potencial, autoconocimiento, cambio, aprendizaje, responsabilidad, autorrealización. Podríamos decir que el coaching es el arte de provocar en el otro un choque de conciencia sobre cómo es su vida con la intención de iniciar un ejercicio de autorreflexión emocional, creencial y comportamental que implique siempre la búsqueda de potencial interior para encarar el cambio que realmente necesita. El resultado final es una enseñanza vital que sitúa a la persona como la única responsable de su vida y la traslada a un estado óptimo de crecimiento personal.
A simple vista esta definición nos posiciona en un plano personal, una mirada introspectiva. No hay ninguna duda, así es como lo entiende y trabaja el coaching en sus líneas generales y como lo entiende también, en parte, el coaching social.
Pero no nos detengamos aquí. Ahora te invito a que le des un toque más social a los anteriores conceptos, un prisma contextual. ¿Qué te sugeriría? Tal vez que el coaching social es el arte de provocar en el otro un choque de conciencia personal y colectiva de cómo es su vida y realidad social, con la intención de iniciar un ejercicio de autorreflexión emocional, credencial y comportamental que implique siempre la búsqueda de potencial interior para encarar el cambio que necesita su entorno, con el objetivo final de reconducir su vida hacia un equilibrio personal y social.
El resultado es un proceso de aprendizaje que dota a la persona de una enorme capacidad para influir en su vida pero también, y esto es crucial, de la sociedad en la que quiere alcanzar su estado óptimo de crecimiento personal.

El matiz de “lo social” es obvio, esa es la intención. Pero tal vez esta definición no te haya aportado nada nuevo, al fin y al cabo en un proceso de coaching personal se contempla y trabaja con los factores externos que influyen o dificultan el cambio en el cliente. Totalmente de acuerdo. Frente a este hecho es donde el coaching social empieza a “hacer de las suyas” aportando una nueva perspectiva de estudio con el fin de posicionarse –salvando distancias- entre el coaching y la intervención social como un modelo verdaderamente potente.

Fenomenal. ¿Pero entonces cuál es su marca personal? Aunque ahora profundizaremos en ello, en resumen el coaching social cimienta sus principios en la creencia de que el individuo es el principal actor y responsable para acabar con las problemáticas sociales que le rodean.
En el coaching entrarían a formar parte también factores externos del cliente, tales como la familia, los amigos, el trabajo, la pareja, etc. Este argumento es cierto, aunque el coaching personal suele partir de la premisa de que el cliente tiene las necesidades básicas cubiertas y la posición social, cultural y económica en la que se encuentra no le supone una seria amenaza; el público objetivo y el terreno en el que actúa es distinto al del coaching social. El coaching social se ubica e interviene en contextos de desigualdad, con lo cual la trascendencia de los factores sociales o externos es mucho mayor. Entiende que la realidad social es una limitación tan significativa como lo puede ser la emocional o credencial, por ejemplo. A nivel teórico se entiende a la persona como un ser necesariamente social y, por lo tanto, todo lo que pase en su entorno le influirá enormemente.


¿Cómo se integra el coaching en la intervención social?
Pero un momento, ¡en este debate también se ven implicados los técnicos y estudiosos de la intervención social! Ciertamente, y aquí hay un punto a favor en este campo, cada vez se están abriendo más las puertas a introducir ideas muy afines al coaching tales como la inteligencia emocional, la motivación, el liderazgo, las habilidades comunicativas, la empatía… aunque muchas de ellas se quedan en meros talleres dirigidos a los colectivos implicados. En este aspecto es donde el coaching social aporta el punto innovador y distintivo, y es que va más allá de intervenir a nivel grupal (coaching grupal); la clave está en las sesiones individuales, en sacar lo mejor de cada uno para el bienestar de todos los demás: el cambio individual lleva inevitablemente al desarrollo social. El objetivo es integrar la filosofía del coaching en este tipo de intervenciones. Por suerte ya existen algunos expertos -como es el caso de Silvina Monteros, investigadora social y partidaria de un modelo de intervención orientado a potenciar las capacidades y la libertad de las personas- que apuestan por estos preceptos, pero siguen siendo pequeñas iniciativas ya enmarcadas dentro de proyectos e intervenciones sociales diseñados desde otro marco teórico. La investigación, acción-participativa, sería, tal vez, el modelo que más se acerca a las intenciones del coaching social, aunque en mayor o menor medida no dejan de ser intervenciones directivas dónde los expertos siguen teniendo protagonismo, actitud de la que se desprendería el coaching social, precisamente porque entiende que la persona es la única capaz de decidir su destino y motivar su cambio, por lo que el ritmo y acciones las marca ella.

Recapitulemos. Hasta ahora hemos visto como el coaching social se presenta, por un lado, como una disciplina nacida del coaching y que comparte con éste la creencia en el potencial del ser humano como agente de cambio individual y, en última instancia, de cambio social. Por otro lado, pretende integrar estos valores y fundamentos dentro de las disciplinas de la intervención social, no solamente como metodología y técnica, sino a nivel teórico y estructural, teniendo en cuenta siempre la dimensión social.

En definitiva, el coaching social tiene como misión potenciar la libertad y autonomía del ser humano trabajando a nivel individual e integrando en este proceso la comprensión de la realidad social de la persona, para que después este cambio se expanda a nivel colectivo y acabe, de una vez por todas, con las desigualdades.

¿En qué colectivos o desigualdades sociales centra sus esfuerzos?
Al igual que lo hace la intervención social, el coaching social fija como beneficiarios a todas las personas que se vean afectadas por un contexto socioeconómico hostil y que les impida la autorrealización y libertad individual y grupal. Entre ellos se encontrarían, por ejemplo: los inmigrantes, las mujeres en situación de desigualdad de género, culturas minoritarias, personas con problemas económicos graves discapacitados/as, personas con drogodependencia, colectivos en riesgo de exclusión social, etc.

En los siguientes números de Crearte Magazine iremos perfilando en profundidad líneas de actuación del coaching social.

Jaume García
jaumegarciatora@creartemagazine.com

Valores: ¿Cuáles son tus prioridades en la vida?

Los valores son convicciones profundas de los seres humanos que determinan su manera de ser y orientan su conducta. Es importante conocerlos y respetarlos pues marcarán directamente tu capacidad de ser feliz en consonancia contigo mismo.
En el siguiente test te ayudamos a reflexionar sobre ellos.

Instrucciones:

1- Realiza cada paso una vez leído y antes de pasar al siguiente.
2- Lee el listado de valores (ordenado alfabéticamente) que encontrarás a continuación.
3- Tómate 3 minutos para escoger los 10 valores que quieres para tu vida. Sólo pueden ser 10 y es importante respetar el tiempo marcado por el test.
4- Dedica ahora 1 minuto a escoger 5 de los 10 valores que previamente habías seleccionado.
5- Finaliza el test con 30 segundos para elegir 3 de los 5 valores que habías preseleccionado y ponerlos por orden de preferencia. Estos 3 valores resultantes son los correspondientes a los pilares básicos de tu vida.

Listado de valores (ordenado alfabéticamente):

Adaptabilidad
Afecto
Amistad
Aprendizaje continuo
Autoestima
Ayudar a la sociedad
Ayudar a los demás
Belleza (física)
Beneficio económico
Calidad
Cambio y variedad
Competitividad, ser competente
Comodidad
Compromiso
Comunicación con los demás
Conocimiento
Consciencia ecológica
Control
Cooperación
Creatividad
Crecimiento
Dedicación
Democracia
Desarrollo personal
Desarrollo profesional
Diálogo
Dinero
Distinción
Entusiasmo
Estabilidad
Estatus social
Estatus intelectual
Ética
Fama
Familia
Fiabilidad
Honestidad
Honor
Humildad
Influir en los demás
Innovación
Integridad
Involucración
Lealtad
Liderazgo
Logro
Mérito
Motivación
Naturaleza
Orden (tranquilidad, estabilidad)
Placer
Poder y autoridad
Precaución, evitar riesgos
Pasión
Perseverancia
Propósito, desarrolar un propósito vital
Reconocimiento (respeto y estatus)
Relaciones de calidad
Relaciones personales
Religión
Respeto
Reputación
Responsabilidad
Reto, logro
Riqueza
Sabiduría
Salud
Seguridad
Seguridad económica
Ser competente, eficiente
Serenidad
Ser útil
Sofisticación
Supervisar o enseñar a otros
Trabajar bajo presión
Trabajar con otros
Trabajar solo
Trabajo con significado
Trabajo fácil
Tranquilidad en el trabajo
Trascender, dejar un legado
Verdad
Vinculación
Vocación

miércoles, 21 de septiembre de 2011

CARA A CARA: Budismo zen y budismo tibetano

¿Has oído hablar de la meditación? ¿Resulta muy complicada su práctica? ¿Es adecada para tí? ¿Qué beneficios aporta? Descubre las respuestas a estas y otras de las principales incógnitas sobre el arte de meditar en este cara a cara entre budismo zen y budismo tibetano.




10 preguntas a la meditación zen

Entrevista a Pedro Taiho Secorún. Nació en octubre de 1955, es el responsable del Centro Zen de Barcelona. Miembro fundador del dojo de Barcelona, comenzó su práctica en 1979 al conocer la enseñanza del Maestro Deshimaru. En el año 1983 fue ordenado monje por Étienne Mokusho Zeisler convirtiéndose en su discípulo. Actualmente practica bajo la dirección del maestro Dosho Saikawa Roshi, de quien ha recibido la transmisión del Dharma (Shiho).

¿Cuáles son los orígenes del budismo?
Todo el budismo proviene del despertar de Buda sentado bajo el árbol donde alcanzó la iluminación. El Zen actualiza el despertar de la conciencia de Buda en cada persona, aquí y ahora, en nuestra vida.
Fue enseñado por Buda en la India, posteriormente introducido en la China por Bodhidharma en el siglo VI, implantado en Japón por Dogen en el siglo XIII.

¿Qué es?
El Zen es la práctica del despertar, de la intimidad con uno mismo, con el Buda que todos somos, con nuestro ser original que está ahí pero que a menudo no lo percibimos enredados como estamos en nuestras propias ilusiones. Básicamente es una practica del despertar, Buda quiere decir exactamente “el que ha despertado” a la realidad tal cual es.

¿Cuáles son sus características principales?
Es una experiencia no una creencia. Hay que realizarlo en nuestra vida, practicar, con todo nuestro cuerpo y mente. No hay dogmas, no hay obligaciones, solo un camino correcto que hemos de descubrir y que está bajo nuestro pies. El zen es la práctica de la transformación del ser.

¿En qué consiste su práctica?
El zen se basa en la práctica de zazen (meditación). Sentados en la postura justa, la respiración se vuelve tranquila y natural y la actitud de la mente entre la concentración y la observación. Plena conciencia sobre nuestros pensamientos actos y palabras. La actitud de la mente durante zazen es la actitud de la no-identificación. Durante nuestra práctica de zazen numerosos pensamientos y emociones aparecen, pero hay que observarlos y dejarlos pasar sin agarrarse a ellos, sin perseguirlos, continuando su flujo incesante. Tampoco hay que rechazarlos ni intentar ocultarlos. En nuestra práctica no hay nada que perseguir ni nada que rechazar. Si obramos así, tanto pensamientos como emociones acaban siendo como nubes en el cielo que pasan, y la conciencia que está más allá del pensamiento y del no pensamiento aparece. La no-identificación con los propios pensamientos nos permite volver a la condición original, a la realidad de nuestra vida en unión con todo el universo, a la no dualidad. Al estar en armonía con la verdadera naturaleza de nuestra existencia aparece una gran libertad interior.
Intentar hacer el bien, evitar que el mal aparezca, practicar la generosidad.

¿Quién lo puede practicar?
La vía del zen es abierta a todo ser humano. Todo el mundo puede practicar la meditación zen, zazen, es igual si es cristiano, judío o de cualquier otra religión, de hecho hay gente de esas religiones que practican el zen.
El zen, repito no tiene dogmas, es una vía hacia la liberación de nuestra ignorancia que pasa por la experiencia de la unidad a través de la práctica.

¿Se puede practicar en cualquier lugar?
En cualquier lugar. De todas maneras se aconseja la practica de zazen en un lugar tranquilo y ventilado, pero a veces no es posible y se puede practicar en medio del ruido igualmente. La práctica del zen va más allá de la meditación sentada, es una práctica que nos lleva a la plena conciencia en nuestra vida cotidiana. El lugar es aquí y el momento es este.

¿Hay un tiempo mínimo o máximo recomendado para la práctica?
No hay regla fija, pero habitualmente solemos hacer dos periodos de media hora o 40 minutos.

¿Podrías hablarnos de sus beneficios y contraindicaciones?
Paz y tranquilidad. Profundidad de visión. Se ha demostrado que desintoxica el cuerpo, que aumenta el grado de serotonina en el cerebro, etc. Se han demostrado algunos efectos de la meditación sobre el ser humano pero zazen es una práctica sin meta que nos lleva hacia lo más profundo de nosotros mismos. Meditamos porque meditamos, no porque esperamos nada del hecho de meditar. No hacemos zazen por conseguir beneficios.

No existe ninguna contraindicación en especial, de todas maneras no se aconseja hacer zazen a quien tenga alguna enfermedad psíquica grave.

¿Cuál es la principal diferencia respecto a la meditación tibetana?
Zazen es una meditación budista que se remonta al momento primigenio cuando Buda despierta. Esta meditación, zazen, consiste en dejar pasar los pensamientos y emociones, no apegarse a ellos, y volver continuamente al momento presente. Es una práctica de despojamiento, de abandono. No hay dirección guiada, no hay que conseguir nada ni rechazar nada, no jugamos con nuestro pensamientos ni con nuestro cuerpo, simplemente hay que observar y abandonar. Y volver a la respiración, a la plena conciencia de la respiración, de la postura y del momento presente.

¿Qué similitudes encuentras entre la meditación Zen y la meditación tibetana?
Ambas tienen como finalidad mental el auto conoci-miento y la paz interior.

Centro Zen de Barcelona: c/ Castillejos, 274 baixos, 08025 Barcelona.
Mail: infozen@zenbar- celona.org. Web: www.zenbarcelona.org




10 preguntas a la meditación tibetana

Entrevista a Venerable Thupten Wangchen. Nació en la villa de Kirong (Tíbet), en 1954 y, desde 1994 (año de su fundación), dirige la Casa del Tíbet de Barcelona bajo las indicaciones y recomendaciones de S.S. Dalai Lama. Casa del Tíbet nace con la finalidad de ampliar la difusión de la cultura tibetana y los derechos humanos, así como la colaboración y solidaridad con la comunidad tibeta
na en el exilio. Lama Wangchen, que desde los 16 años dedica su vida a profundizar en el estudio de la filosofía budista, se dedica enteramente al proyecto después de 1891, año en el que visitó España por primera vez.

¿Cuáles son los orígenes del budismo?
Sabemos que Budismo viene de Buda. Buda nació en Asia hace 2550 años en el reino de Lumbini (ahora Nepal). Nació en la figura del príncipe Siddharta, quien tenía todas las cosas dentro de su palacio: felicidad, sonrisas, disfrutaba la vida. Pero cuando salía a la calle veía mucho sufrimiento y pensó: ‘yo soy uno que está disfrutando demasiado y los demás que están fuera en la calle están llenos de sufrimiento: sufrimiento de la muerte, sufrimiento del nacimiento, sufrimiento de enfermedades, etc. Que lástima, yo quiero saber por qué la gente sufre, por qué tienen enfermedades, por qué mueren’. Entiende que no hay respuesta dentro del palacio y decide escapar para buscar la verdad. Estuvo meditando intensamente durante 6 años. Sobre el origen y las causas principales del sufrimiento, el dolor en los seres humanos y en los animales. Encontró que, debido a las emociones negativas: la ignorancia, el odio y el apego se crea mucho karma negativo. La emoción negativa produce sufrimiento. En cambio la compasión, el amor a todos los seres, la paciencia y la tolerancia producen fuerza interior y construyen más paz y tranquilidad. Al encontrar estas respuestas en su interior alcanzó el estado de iluminación y perfección.

¿Qué es?
Meditar es cultivar la mente, desarrollar la comunicación interior para el beneficio de los seres vivos. Nosotros siempre tendemos a ver hacia fuera, proyectar hacia fuera. Después, internamente nos sentimos vacíos e infelices, siempre queriendo más. Por lo tanto la meditación es buscar conocerte más, cuidar tu interior y reflexionar sobre lo que piensas, lo que haces y cómo hablas: cuerpo, palabra y mente en presente. Vivir en el presente es muy interesante.

¿Cuáles son sus características principales?
Busca la transformación de la mente, a través de las visualizaciones y la dedicación al beneficio de todos los
seres. Se busca aquietar la mente con la intención de
suprimir las emociones negativas y desarrollar los aspectos armoniosos del amor y la compasión hacia los demás.

¿En qué consiste su práctica?
Hay muchos niveles de meditación: desde los principiantes hasta los más avanzados. A un nivel muy básico es importante la postura física: sentarse cómodo, con la columna vertebral recta, con los ojos cerrados pero relajados, los hombros relajados pero no muy abajo (encorvados), idealmente con las piernas cruzadas y respirando normalmente. Concentrar la mente en la respiración: atento a cómo entra y cómo sale el flujo de aire. En ese momento la mente no tiene espacio para distraerse en otra cosa. Una vez que hayas calmado la mente, hay más trabajo: la visualización o la inspiración en algo positivo: ayudar a los demás, compasión hacia otros, eliminar el sufrimiento en otros seres, incluso los animales... si la mente se cansa por no estar acostumbrada, puede ayudar recitar el mantra Om mani padme hum y así la mente se va relajando poco a poco.

¿Quién lo puede practicar?
La puede practicar cualquier persona que busque mejorar, aunque es normal que la gente que no sepa nada de nada de budismo le cueste entender la meditación, así como aalguien que no sabe nada del catolicismo le resulta complicado entender su doctrina. La meditación es para todo el mundo: lo más importante es la comunicación interior y que tu mente, tu conciencia sienta algo espiritual: el valor y el beneficio para todos los seres. Después, a medida que vas aprendiendo las enseñanzas con lecturas y Lamas puedes incorporar más cosas.

¿Se puede practicar en cualquier lugar?
Por supuesto. Una vez que ya sabes cómo meditar, así como el propósito y motivación correcta para la meditación, no importa el lugar. Puede ser en el pico de una montaña, en la playa, en casa, en el sofá o en la cama. La meditación no tiene lugar.

¿Hay un tiempo mínimo o máximo recomen dado para la práctica?
Depende de cada quien. Para empezar se recomiendan sesiones de 10 a 15 minutos en la mañana, igual tiempo al mediodía y en la noche. Si empiezas con 1 o 2 horas de meditación te va a cansar y te va a quitar las ganas. Todo tiene que empezar poco a poco e ir incrementándose hasta llegar al estado de un monje que puede meditar 5, 6 u 8 horas.

¿Podrías hablarnos de sus beneficios y contraindicaciones?
En primer lugar, conocerte mejor a ti mismo. Esto significa cambiar tus actos; es decir, como tú deseas la felicidad y la paz, así mismo los demás seres humanos desean la felicidad y vivir en paz. Así como tú no quieres recibir críticas ni daño de otros, tampoco los otros quieren recibir daños y malas actuaciones o críticas; por lo tanto generas la conciencia y buscas no hacer daño. Es lo que las enseñanzas definen como ‘la auto moral’: ser menos egoísta y ser más de los demás; hacer el bien y no el hacer mal. A nivel salud física: si tienes algo espiritual, si te conoces mejor a ti mismo, el tener una mente sana produce más felicidad, más sonrisa, eres más abierto y menos fanático o sectario. Aunque puedas estar enfermo siempre estás feliz, transmites alegría y el dolor se aminora. Cuando la mente está muy triste, el cuerpo también se deprime y siente más dolor. Cuando entiendes la impermanencia de todo, sabes que el dolor es temporal, por lo que le quitas la intensidad a ese dolor que tienes y te animas.

Nada dura para siempre y este concepto siempre anima; entiendes que todo pasa. En cuanto a las contraindicaciones, todo el mundo puede practicar la meditación pero si es importante hacerlo gradualmente. Para prácticas muy elevadas hay que tener más práctica y más enseñanzas. En principio se medita sin visualizar divinidades y cosas complicadas, esto sería peligroso. Es como el niño que no puede ir a la universidad sin pasar antes por el colegio. Nosotros decimos que este proceso es como el paso de la tortuga: camina despacio, muy despacio, pero finalmente, con constancia, llega a donde se propone.

¿Cuál es la principal diferencia respecto a la meditación Zen?
El Zen, o escuela Theravada, piensa más en la presencia, en lo más cercano. Meditan para la autoliberación personal: ‘yo quiero liberarme’, ‘yo quiero tener Nirvana’, ‘yo quiero felicidad’, ‘yo no quiero tener problemas’. Ese ‘YO’ es bastante fuerte y al mismo tiempo ‘si no tengo YO no puedo dar a nadie’. Esto es muy lento, es como una carretera con muchas curvas, pero al final llega. La motivación es de autoliberación. Al mismo tiempo no se complican con visualizaciones de budas con muchas caras; son simplemente como una pared blanca: vaciando la mente, sin concepto. Vaciar la mente para no tener conflictos o preocupaciones. El camino del budismo tibetano es más recto; desde el principio piensas que los demás son más importantes, visualizas los budas, envías luces, para lo cual se requiere entrenamiento.

El budismo tibetano es como una tienda por departamentos: hay muchos niveles con muchas cosas para toda clase de personas. Todas las enseñanzas de Buda están compiladas dentro del paquete del Budismo Tibetano, por lo que la gente puede escoger lo que quiere o lo que necesita.

El Budismo Zen es muy bueno, hacen el bien y no hacen el mal, pero sería comparable con una farmacia en la que sólo consigues medicamentos.

¿Qué similitudes encuentras entre la meditación Zen y la meditación tibetana?
El propósito es el mismo en cualquier tipo de meditación: calma mental y autoconocimiento.

Fundación Casa del Tibet: c/ Rosselló 181, bajos, Barcelona 08036.
Mail: info@casadeltibetbcn.org Web: www.casadeltibetbcn.org